¿Cuándo una persona es obesa?
Se considera SOBREPESO cuando el Índice de Masa Corporal – IMC (peso en kilos dividido por el cuadrado de la talla en metros) está entre 25 y 30, OBESIDAD LEVE si el IMC se sitúa entre 30 y 35, OBESIDAD SEVERA entre 35 y 40, y OBESIDAD MÓRBIDA si el IMC es mayor de 40.
¿Cuándo tengo que pensar en operarme?
Si el IMC es mayor de 35 y tiene enfermedades asociadas, o si es mayor de 40 con o sin comorbilidades, y cumple los criterios del apartado de INDICACIONES y no presenta ninguna de las contraindicaciones relatadas, su solución pasa por una INTERVENCIÓN QUIRÚRGICA.
Si padece DIABETES tipo 2 con mal control metabólico y tiene un IMC entre 30 y 35 podemos valorar su caso y analizar los beneficios de la Cirugía Metabólica de la Diabetes.
¿Por qué me tengo que operar si estoy bien?
El objetivo de la cirugía es mejorar la salud a través de la pérdida controlada de peso. La obesidad es causa de múltiples enfermedades que se desarrollan a lo largo del tiempo en casi todos los pacientes, causando una peor calidad de vida y un acortamiento de la misma. Si es obeso mórbido y aún no presenta enfermedades asociadas es el mejor momento de ponerle solución, así el riesgo quirúrgico es menor. Si no toma la decisión ahora que su salud no está demasiado afectada, espere y verá como aparecen estas enfermedades, complicando y acortando su vida.
¿Cuándo no debo someterme a una operación?
En caso de presentar una de las CONTRAINDICACIONES o no reunir los criterios de INDICACIÓN QUIRÚRGICA no debe someterse a este tipo de intervenciones. La indicación de esta intervención no debe banalizarse, pero tampoco hay que ganar adrede 2 Kg. de peso para que su IMC sea mayor de 40 si la trayectoria es claramente ascendente a pesar de las dietas controladas.
¿Qué coste económico tiene?
El coste es variable según la técnica, si bien en la mayoría de casos puede acordarse con el Hospital un precio cerrado de la realización de una técnica estándar sin extras (transfusiones en caso de ser necesarias, medicaciones especiales, estancias prolongadas en UCI u hospitalarias, etc).
¿Hay ayudas de financiación?
Si bien ni nuestro equipo, ni el Hospital, son entidades de crédito, podemos facilitarle el acceso a un crédito para el procedimiento, aunque probablemente las condiciones son similares en la mayoría de los bancos y cajas.
¿Dónde me operan?
Realizamos las intervenciones en el Hospital Quirónsalud de Valencia (Avda. Blasco Ibáñez 14, 46010 – Valencia), que reúne todas las condiciones necesarias y garantías para llevar a cabo con éxito esta cirugía. Tanto el material médico y quirúrgico de última tecnología, como el personal auxiliar y de enfermería, los equipos médicos implicados y las habitaciones (limpias, reformadas y modernas) son de nuestra completa satisfacción y confianza.
¿Cuántos días tengo que estar ingresado?
Normalmente la estancia hospitalaria es de 48h, según sea la recuperación del paciente y su lugar de procedencia dentro de la misma provincia o desde otra, o incluso desde el extranjero.
Podemos coordinar junto con el Hospital una estancia temporal en un Hotel-Resort en la Costa a gusto del paciente y sus acompañantes para los primeros días tras el alta hasta la recuperación suficiente para poder volar de vuelta a su país de origen.
¿Tendré que ir a la UCI después de la intervención?
Salvo excepciones, los pacientes se recuperan bien de la anestesia y pasan a su habitación, sin necesidad de UCI.
¿Cuál es la mejor técnica?
Cada paciente es diferente, y es importante analizar cada caso de forma individual, para aconsejar una técnica u otra. La opinión del paciente, correctamente informado, es muy importante. La mejor técnica es la que mejor se adapta a las necesidades del paciente, porque será la de mayor éxito a largo plazo.
¿La pérdida de peso es para siempre?
Después de la cirugía se pierde peso durante un año hasta un año y medio, si bien la mayor pérdida ocurre durante los primeros 6 meses. Esta pérdida de peso es permanente, es decir, para siempre. En ocasiones se puede recuperar algo de peso (alrededor de 5 kilos) en los años posteriores. Ganancias de peso más importantes son muy raras y suelen deberse a descontroles en el seguimiento o en las pautas dietéticas recomendadas.
¿Qué riesgos tiene someterse a una operación de obesidad?
Los riesgos están descritos estrictamente en el apartado de esta web. Esta cirugía no está exenta de riesgos, como cualquier intervención quirúrgica, aunque los riesgos se asocian en mayor medida a las condiciones de salud de los pacientes más que a la técnica quirúrgica en sí. Es decir, las posibles complicaciones son potencialmente más graves cuanto mayor número de comorbilidades presenta el paciente y mayor es su peso y su edad.
Nuestra especial dedicación desde principios de los años noventa nos ha permitido reducir el riesgo de mortalidad hasta los niveles de los mejores hospitales internacionales, por debajo del 0.5%. El seguimiento estricto e intenso durante el postoperatorio ha minimizado el número de complicaciones como infecciones de herida, de orina, o del pulmón hasta prácticamente cero.
Con el BYPASS GÁSTRICO o con la GASTRECTOMÍA VERTICAL LAPAROSCÓPICAS, las deficiencias de hierro o de vitaminas y minerales son infrecuentes, y responden bien al tratamiento complementario. No producen diarrea como otras técnicas quirúrgicas, aunque se puede ir un poco más suelto cuando se ingieren comidas con mucha grasa.
¿Qué beneficios tiene someterse a una operación de obesidad?
El objetivo de la cirugía bariátrica y Metabólica es la SALUD, curando o mejorando las enfermedades asociadas a la obesidad que acortan y condicionan la calidad de vida a través de la pérdida controlada de peso. Además, esta pérdida de peso SIN ESFUERZO mejora la autoestima, mejora la vida de relación, la vida sexual, la actividad física, la vida laboral, etc. La CIRUGÍA DE LA OBESIDAD cambia la vida de los pacientes. Cuando preguntamos a los pacientes si se volverían a operar responden que OJALÁ LO HUBIERAN HECHO ANTES.
Tras la operación, ¿deberé someterme a una dieta estricta?
No se trata de hacer una dieta, sino de aprender y adaptarse a unos hábitos dietéticos saludables, recomendables para cualquier persona, operada o no. Es cierto que, inicialmente, las cantidades ingeridas son mucho menores. Esto no debe preocupar a las personas de su entorno, ya que con el tiempo el reservorio gástrico se dilata un poco, permitiendo ingestas algo más voluminosas. No obstante, lo normal es comer de todo, en pequeñas cantidades, y repartido en varias comidas. Por su forma de comer nadie sabrá nunca si está usted operad@.
¿Podría hablar con algún paciente para que me cuente su experiencia?
Habitualmente nuestros pacientes están encantados de compartir su experiencia POSITIVA con otros pacientes, tanto en las Consultas Externas como en el Hospital. De hecho es frecuente que vengan pacientes – amigos a visitar al hospital a los recién intervenidos, incluso se hacen amistades extrahospitalarias. A través del apartado PREGUNTAS se pueden facilitar contactos, preservando siempre la intimidad y el anonimato del paciente que así lo desea.